Spartacus

Muchas versiones se han hecho acerca de la historia del gladiador Espartaco. Hoy te voy a hablar de la serie de televisión que ahora además puedes encontrar en Netflix.

Es sangrienta, mucho. Creo que es un color característico de la serie. Ese chorro de sangre arterial que cada poco tiempo aparece en la pantalla es, junto a los cuerpos desnudos, la esencia de la serie.

Vamos a descubrir como vivían los poderosos romanos y como trataban a los esclavos. Los excesos no solo se cometen sobre la arena del circo. Vino, comida y sexo parecen alimentar a unos romanos casi insaciables.

De todos los momentos de la serie confieso que me encantan esos momentos en los baños donde una docena de gladiadores se asean desnudos. Se representa de una forma tan natural que casi parece que nos hayamos colado en la escena siendo invisibles.

Una de las cosas que más me chocan es la forma en la que se usan a los esclavos. Justo ahora, mientras escribo estas lineas, en la pantalla aparece una selección de esclavas desnudas y atadas que son conducidas por la calle hasta el lugar donde serán expuestas para su venta.

En lo referente a los momentos de intimidad de una pareja de señores romanos las esclavas sirven para estimular con sus manos el clítoris de su señora o con su boca el pene de su señor. De esta forma la pareja se prepara para tener relaciones entre sí. Incluso si hace falta el señor puede empezar poseyendo a la esclava y después terminar con su esposa.

Las esposas también sirven para ser exhibidas en las fiestas y cenas. Si sus amos así lo desean deben complacer a sus invitados o quizás tener sexo sobre la mesa con otro esclavo.

Es un mundo de excesos y de apariencias, de intereses y de poder. Y eso es lo que continuamente nos recuerdan en la serie.

Me llama la atención como las esposas de importantes romanos visitan el Ludus (casa donde viven y se entrenan los gladiadores) tan solo por el morbo de verse rodeadas de esclavos fuertes, valientes y casi desnudos. En ocasiones, solicitan los servicios carnales de estos, bajo la máxima discreción del Ludus. A modo de prostíbulo las aburridas romanas hacen realidad sus fantasías antes de volver al lado de sus maridos.

Otra muestra de esta sociedad en la que el sexo y el dinero lo mueve todo es una expresión que se repite muy a menudo: Por la Polla de Júpiter. La todopoderosa polla.

¿Cuánto de real tiene todo esto? Ni idea. Los excesos de los romanos siempre han sido muy famosos al igual que sus orgías pero ¿hasta que punto se refleja la realidad en la serie? Lo ignoro.

Aquí de lo que se trata es de descubrir un mundo en el que, además de una trama, encontremos momentos sensuales y eróticos que nos despierten.

Algunos de ellos van a ser bastante específicos aunque yo no los clasificaría de pornográficos. Vamos a ver mujeres y hombres desnudos pero, en lo que se refiere a los actos puramente sexuales, nunca vamos a ver un primer plano.

Para mi gusto el director trata estos momentos con mucho gusto y cuidado. Es una serie que, a pesar de los momentos tan violentos y duros que se viven, la recuerdo como altamente sexual y erótica.

Espero que, si te decides a verla, compartas tu experiencia conmigo.

Que la disfrutes y te inspire a cometer eróticas aventuras.

Christine Erotic